No sé porqué razón regreso a verte ,
si solo encuentro, el vacío de tu voz
con la niebla, humillándome feroz,
y la sombra fresca, de la huella inerte.
Insolente vendaval , negra muerte,
lodoso río, de cauce veloz,
roes la razón y dejas la coz
arrasando, muriendo el alma fuerte.
Serena inquietud, abrazada al viento,
camino en la rosa de tu descuido
deshojada, con hambre,desolada.
Angustiada en la noche, sin aliento
con el beso desvelado, rendido,
me duermo sin voz ,negada, olvidada.
Verónica ©
12.10.10