Madre !



Sus ojos , acusan la huella del tiempo,
ausentes, cerrados por el cansancio,
sus manos frías, buscan el calor
de ese  amor que vivió, bajo los almendros.

La vida le bendijo y le dió sueños, 
alumbrando sombras en solitario,
caminando adonde nadie alcanzó
Hoy, te veo privada de deseos.

Cierto es,  que lejos están los luceros, 
y tus brazos no alcanzan el espacio,
que tu voz se angustia por el pavor
de ver una de tus  estrellas durmiendo.

Levántate Madre!, mira ese cielo
estrellado, y  apresura tu paso,
motívate, aleja ya ese cansancio
y sonríe, que juntas venceremos.


Verónica ©
01.02.13

1 dejaron su eco:

mar dijo...

Amiga, mi blog se eliminó sin querer, pero estás invitada al nuevo y a mi Cumpleaños también.
Cariños.
mar